Se habla mucho de repartir los gastos 50/50 en pareja, pero ¿existe la misma preocupación por repartir las tareas domésticas y de cuidado 50/50?
Por: Ana Karen Ocampo
Fotos: Cortesía
El 50/50 es un debate que ha existido por mucho tiempo en la historia de la humanidad. El otro día me encontré con un tweet en el que un usuario decía: “Se habla mucho de repartir los gastos 50/50 en pareja, pero ¿existe la misma preocupación por repartir las tareas domésticas y de cuidado 50/50?”
Y ahí encontré mi respuesta al título de este artículo, el 50/50 no es real, pero además el planteamiento tiene un mal enfoque, habla de una “división” de gastos, de pagos, de responsabilidades; y creo que ahí es donde entramos en un error. Las cosas nunca van a ser 50/50, porque:
- No todo es cuantificable.
En una relación hay “actos” que funcionan como activos que le demuestran a tu pareja que te preocupas por ella. Estos van desde los más visibles, como los regalos, hasta otros más sutiles, como buscar que se tome las vitaminas.
Y en este mismo sentido, hay cosas menos románticas, pero igual de importantes: Es un tema ya bien hablado que las labores domésticas son trabajos no remunerados y que son TAN válidos y significativos como el ser el proveedor económico de una familia.
El punto es, ¿cómo cuantificas el que tu pareja lave los trastes o te prepare tu café de la mañana? ¿Cuántos puntos vale esto y cuántos vale pagar la cuenta?
2. Más da más, menos da menos.
En el inicio de nuestra relación platicaba con mi esposo acerca de cómo nos sentíamos respecto al tema. Él decía que a veces es claro cómo en noviazgos alguien «da más», que a veces se observa cómo hay alguien que da un 70% y la otra persona el 30%. Y me decía que era la primera vez que sentía que, no sólo la otra persona (o sea yo) daba el 50%, sino el 70%, pero que él también sentía quedaba el 70%. Y, a ver, mi esposo no es malo en matemáticas, tiene una maestría en administración, estamos muy conscientes de que 70+70 =140, pero ¿se entiende el punto?
Cuando estás preocupado por cómo das más a la relación, tu pareja lo nota y busca cómo responder a este acto, entonces la relación se convierte en un círculo virtuoso. Más da más. Y de la misma forma, si no te sientes apreciado, se convierte en un círculo vicioso. Mucho ojo que esto es si estás con una persona en la que encuentras reciprocidad, por favor no estés ni toleres a alguien abusivo. Más allá de los acuerdos económicos a los que llegues con tu pareja creo que este tipo de discusiones no se convertirán en peleas si el enfoque es distinto, si se habla desde la suma y no desde la resta.
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