La belleza de Yucatán es inigualable, ésta, no solo se compone de sus escenarios naturales que parecen salidos de otro mundo, sino, de un mestizaje cultural que da vida a uno de los destinos más cautivadores del mundo.
Texto y fotos: Cortesía
Gracias a sus costas de aguas verde esmeralda y turquesa, construcciones prehispánicas y cultura colonial, además de su tradición gastronómica, el paradisíaco estado de Yucatán recibe anualmente a miles de visitantes que buscan aventurarse por este mágico destino.
La belleza de Yucatán es inigualable, ésta, no solo se compone de sus escenarios naturales que parecen salidos de otro mundo, sino, de un mestizaje cultural que da vida a uno de los destinos más cautivadores del mundo, en el cual debes adentrarte poco a poco para descubrir cada uno de sus rincones.
Mérida, “la ciudad blanca”, además de ser de las más visitadas de México por su alto nivel de seguridad, alberga joyas hoteleras de renombre. Entre sus ciudades coloniales y sus siete pueblos mágicos: Espita, Sisal, Izamal, Maní, Motul, Tekax y Valladolid, podrás adentrarte en el auge de las haciendas henequeneras y ganaderas.
De todas las haciendas que hay en la península, aunque varias se encuentran semi destruidas por el paso implacable del tiempo, muchas han logrado conservar gran parte de su historia y estructura, convirtiéndose en espacios increíbles para recorrer.
Yucatán es un lugar rico en diversidad de atractivos naturales, culturales y patrimoniales, más de 3 mil impresionantes cenotes y 378 km de hermosas playas de arena blanca, como Puerto Progreso. Además tiene una fauna amplia y variada; es la casa del flamenco rosado en México y aquí podrás conocer zonas arqueológicas de la cultura Maya como Chichén Itzá, Uxmal y Ek Balam.
Si este verano buscas un destino nacional para visitar, sin duda, la tierra del Mayab es ideal para pasar unas largas vacaciones. Créenos, vas a querer volver una y otra vez.
